Igual que un atractivo bote de miel puede distraer, este sistema que se usa en informática desde hace tiempo ha dado revuelos últimamente por ciertas estafas criptográficas usando el método. La clave es entender cómo funciona para desactivarlo, y así proteger al mercado y sus inversores de la delincuencia y su consiguiente mala reputación que podría causar estragos en el mundo cripto si no se frena.
Los contratos inteligentes usados en las redes descentralizadas se basan en una especie de contrato automatizado. Estos programas informáticos son una de las principales claves del éxito y crecimiento del mercado de las criptomonedas en los últimos años. El problema es que un mal uso de ellos puede llevar a estafas, y esto es por ejemplo lo que hace el honeypot.
Un ejemplo real sucedió en 2018, cuando un delincuente quería robar criptodivisas de usuarios inexpertos. Este delincuente tuvo una idea ingeniosa para su estafa: creó una cartera, colocando 5.000 dólares en $MNE (Minereum), una moneda basada en Ethereum. Luego, compartió su clave privada en un chat público y muchos usuarios pensaron que habían encontrado un gran negocio, así que fueron a retirar las monedas, que estaban asociadas a un contrato inteligente concreto. Como el contrato no se ejecuta por completo, los usuarios sólo pierden su dinero.
Para combatir este tipo de estafas, el mejor remedio a nivel individual es la educación cibernética, así uno sabe qué está haciendo y evita que le engañen. También hay que documentarse antes de cualquier transacción, evitando compras impulsivas sin tener en cuenta criterios de análisis.